Los mejores años de mi vida jamás volverán- ¿por qué?-
la razón está lejos del andar, las sillas buscando sombra alguien dar,
el destino se enrolo en las amargas filas de Don Santiago,
el otro aun sigue siendo un desgraciado, -¿Quién es?- el amargo
carisma que un día se lleno de ira,
-locura de un semental- los restos quedaron tirados, las sombras
sin rumbo siguen andando siguiendo los pasos descarriados
no tienen salida solo refugio
– sin escrúpulos-
el cielo sigo
mirando las aves no están alineadas las montañas carecen
de tamaño como tiempos de antaño,
el inca velando al español
–pobre desgraciado-
nuestras riquezas jamás cesaron,
se llevaron el oro y la maldita plata que en su bolso guardaron,
ricos y saciaron se largaron, no descubrieron América por que no se pudieron llevar nuestra inteligencia, -ironía- las manos cansadas la mente zozobra,
el indígena persiguiendo a la zorra, ya no hay gritos ni lamentos, maldito fue aquel momento…………..
