viernes, 4 de febrero de 2011

Lo siento no puedo describirte, tengo muchos problemas en que pensar como para tomarme el tiempo de describirte, las tareas los trabajos y las amistades no permiten hacerlo, ni hablemos de la iglesia el tiempo pasa corriendo; lo poco que puedo hacer poder hacer es una analogía entre tu vida y la mía: si, así como suena tu vida y la mía, “tu el manantial yo la gota, tu el sol yo la nube, tu el planeta yo venus, tú la manzana yo la semilla, tú la felicidad yo la esperanza, tu el genio yo el aprendiz, tu mi meta yo el camino, tu mi salvación yo la rebeldía, tú la luz que ilumina mi vida ”. Te das cuenta, no tengo mucho que hablar de ti, es imposible describirte, llegaste a mi vida cuando tanto te esperaba, cubriste mi soledad con tu magia deseada, guardaste lo sagrado de este mundo compartiéndolo conmigo, hoy te admiro mujer valiosa, un día sin ti no es día, un día sin ti es casualidad; me enamore como un adolescente empedernido, hoy te tengo conmigo, si que el mundo hable y los chismes corran mientras nosotros el aquel piso damos vuelta sin mirar la hora, si que el mundo nos mire hay tu y yo recostados en el gras natural donde aquella paloma deposita su esencia y amor sobre mi pecho fornido; si que el mundo nos mire, hay tu y yo sentados en el parque “el desconocido”, que nos envidien porque no saben lo que es tocar unas manos mirando a los ojos y decirle con el alma “te quiero”, si que el mundo nos mire y recordaran verte llorar, recordaran las mejillas más hermosas del mundo cristalizadas con lagrimas de una doncella inmaculada; si que el mundo nos mire y……….

Largo todo, me canse de la hipocresía de los gestos decorosos, de los besos fingidos que nunca fragancia carmesí tuvieron, así que de esta manera digo largo a todo, no me busquen ni quieran charlar siempre supe que a la maldad no se podía ignorar, quiero estar solo en medio de un desierto y decir todo lo que es cierto, tu sabes que nunca mentí pues el estino es mi gran amigo, porque con el secretos compartimos, mi gran amante empedernido hombre que andas en mi sombra olfateando mis sentimientos; la felicidad nadie me la trajo, menos yo la conseguí pues cada uno heredo el día que no tiene fin, hoy mi almohada mojas con el sudor de tu dulzura, siempre te imagine recostado en aquel ocaso que no tuvo un final, hoy mi cuerpo grita tu ausencia suplicando tu presencia, el sudor gota a gota caía mi cuerpo la secaba entre ambos existía un misterio que solo tu yo lo sabemos, en nuestros momentos de desprendimiento se hacen realidad los sueños ocultos; hoy mi cuerpo te suplica pidiendo aquel calor que solo tú sabes darlo, es la mística de la naturaleza que solo los incomprendidos pueden llegar a extasiarlo, pues los comprendidos son solo simples mortales; hoy te necesito, necesito aquel calor, necesito tu consuelo, necesito tus palabras, necesito tu sonrisa, necesito tu angustia, necesito tu soledad, necesito tu amor. Hoy reconozco el verdadero sabor de la vida y sé que ante tantas ilusiones solo fueron perdidas, nadie lleno jamás el minuto contigo, solo las féminas son ilusiones de un bandido, tu y yo sabemos el misterio que nos hizo humanos, descubrimos el poder de lo oculto de esta manera descubrimos los cielos, que nadie hable que nadie critique, déjenme decirles que de esta manera me realizo como persona.
Lo busque por años ahora lo tengo, el olor a margarita impregnado en mi sabana me hace recordarte aunque no estás presente, recuerdo aquel encuentro donde demostramos nuestro cariño, tu tan grueso yo tan delgado, tu tan sereno yo tan desesperado, tu tan vulnerable yo tan agitado; tu tan alto yo tan bajo, tu sereno yo ardiendo, ardiendo de temor teniendo timidez fue mi primera vez, fue doloroso, doloroso demostrarte mi amor, mi lengua estaba llena de palabras que nunca salieron, mis piernas temblaban y la espalda me sudaba, tu tan tranquilo como si la experiencia te apoyara, pues también era tu primera vez. Tu sudor nuevamente sobre mi espalda tus manos en mis hombros, tus labios junto a mis oídos, tu cabello castaño y tus brazos fornidos, me sujetaste fuerte a ti, eras el lobo y yo la oveja, el carnicero y yo la carne, el embustero y yo la víctima, el capricho y yo la duda, la fuerza y yo lo débil, el canalla y yo el semental enamorado; la lluvia nos acompañaba sin importar que estábamos mojados, nuestros cuerpos rodaron por aquel océano aquel día tocamos las estrellas jugamos con nuestros dedos, momentos demostrativos de placer y dulzura, dejando de lado los cuentos llenos de basura.
Hoy estamos juntos por siempre, te encontré después de muchas travesuras, hoy fue el día de nuestra lisura, hoy fue el inicio de una democracia donde tú y yo bebimos de las gotas de caían de nuestras espaldas…………..
Identificarte no fue nada fácil, tu sombra de lejos vi, mi espíritu corrió tras de ti, sin darnos cuenta ambos corrimos tras suspiro de aquel canalla, nuestros espíritus sedientos suplicaban aquel aroma que solo los espartanos saben darla; si recuerdo como si fuese ayer, hay nos vimos tu y yo juntos parados frente a una catedral, tu y yo nos miramos fijamente como si fuera al ultima vez hacerlo, no pronunciamos palabra alguna, pues la alquimia corría por nuestras venas, nuestros espíritus ya eran uno solo; sin darnos cuenta andábamos conversando, recuerdo aquella vez y empieza a llover, bendita la hora en que te recibí, no conversamos no murmuramos, tampoco gritamos, dimos inicio a lo deseado, a lo desesperado, a lo llamado, a lo embrujado. Aquel día te tuve dentro de mí como si fuera un aprendiz, tu corazón dentro del mío palpitaba a la velocidad conocida, tus garras arañando mi espalda me hacía sentir el deseo de comprender que solo la inteligencia emocional puede brindarla, mi querido telaraña, pues así te llamo con mucho cariño eres la araña que teje por dentro y por fuera, tus garras no mancillaron ninguna virtud, pues lo nuestro no es mortal, lo nuestro es sin palabras; recuerdo tu gemido como león ardiendo, su sonrisa como sirena escapando de fabulas que solo engañan y traicionan sin poder explicar el verdadero lenguaje del alma, mi amado aun te recuerdo y estas encima de mí, yo debajo de ti, tu cabello largo y tus manos mojadas, recuerdo aquel sudor paseando por mi mejilla como derretida mantequilla, el tiempo no fue lo mismo sin ti, los huecos fueron cubiertos pero aun las cicatrices están abiertas, solo tú puedes curarlo, tú que eres el doctor y yo el paciente, tú la medicina y yo la boca, tú la cura y yo al locura.
Ahora estas lejos de mí, ni tu sombra ni tu calor hoy me consuelan, necesito tu fuerza tu espíritu y tu verdad, te necesito dentro de mí una vez más; tus cartas en mis manos están recordando la prosa y literatura universal que solo tú sabes vislumbrar, tus versos tus poemas y tus encuentros, todos aquí los tengo, no me he olvidado; aun mi sabana pregunta por ti, no tengo respuestas no se a donde llegaste a ir, triste fue ver tu despedida quede vacio sin lugar alguno, fue un naufrago a la deriva, hoy no estás y no comprendo la ausencia tuya, ni el mismo hades soportaría está perdida, el oráculo me dijo que volverías, la pitonisa quedo hecha cenizas ante tal declaración, solo tú puedes llenar este amor.
Seguiré respirando del aire que no gusta de tu ausencia, hasta los cielos te llaman, mi cuerpo te aclama, mis brazos te extrañan, mis labios extrañan el sabor de tus palabras, el entendimiento olfatea aquel crepúsculo que solo tú sabes darlo, iré a buscarte y lo lograre algún día estaremos dentro de cada uno, es lo que más extraño de ti, tu violencia en hacer las cosas y la manera irónica en que reaccionas……